10. Un mensaje y un ensayo

El despertador sonó a las siete, la hora que Soledad le había puesto, pero parecía mucho antes. Vio su móvil con la luz azul característica de los mensajes.

“Un mensaje nuevo recibido”- Avisaba la pantalla.

Lo abrió con las mismas ganas que un niño abre un regalo el día de su cumpleaños y sabe que es ropa, es decir ninguna.

Si la vida me diese un deseo, desearía conocerte de nuevo.
Te espero a las 2:00h en la cafetería Merveilleuse. No tardes.


El mensaje llegaba sin firmar. Primero decidió no ir. ¿Quién se lo enviaba? ¿Quien quería conocerla de nuevo? Como no se le ocurrio nadie, la curiosidad le pudo y decidió que iria a la cafeteria pero solo para curiosidad.

Cuando tuvo decidido esto tuvo decidido que iba a “estrenar” la bañera, ponerse esa sudadera que utilizaba los dias de examen, iba a desayunar, a ir al ensayo.... ¡QUE SE IBA A COMER EL MUNDO!...

Dos horas más tarde, Soledad estaba sentada en el taxi de Mariana a punto de llegar al primer de día de ensayo. En cuanto entró por la puerta vió lo que había conseguido. En cuanto consiguió que todo estuviera en orden, intentó “descubrir” quien era quién en aquel laberinto de caras conocidas. Una vez los organizó les dio a todos la mañana libre excepto a los que se identificaron como los “3 protagonistas” más uno que faltaba, es decir; Lluc que hacía de Oscar, Sydney que hacía de Maite, Rosalie que hacía de Miranda, la mejor amiga de Maite y él que faltaba que hacía de Yago.

La puerta del teatro se abrió y un chico, medio ahogado entró.

-¡Hombre menos mal!- Le gritó Rosalie.- Es el que faltaba- le especificó a Soledad que tenía cara de faltarle algo.
-¿Como te llamas?- Le preguntó Soledad cuando llegó hasta ellos.
-Hasta que me liberé de mis hermanos mayores y empecé el cole, creía que me llamaba "Cállate".

Las risas se generalizaron.

-Ya, ¿y ahora? ¿O te llamó Cállate?
-No, me llamo Fernando, pero llamame Fer.
-Encantada Fer. La próxima vez llega un poco antes. ¿Empezamos?



9. Una vuelta por la antigua vida.

Cuando Soledad llegó al hotel, lo primero que hizo fue llamar a Lluc:

-El teléfono que ha llamado esta apagado o fuera de cobertura.

Soledad se desanimo un poco, pero decidió coger su ordenador y empezó ha escribir un mensaje para sus hermanas.

Hola! Que tal chicas? Por París va todo bastante bien, y tengo un montón de cosas que contaros:
  1. El hotel donde me alojo es estupendo, tiene servicio de habitaciones, unas vistas estupendas, un jardín enorme y precioso, y, (esto va por ti Blanca) ¡una tienda de regalos llena de bolas de nieve! No té preocupes, ya te traeré una, o dos, porque conociéndote seguro que rompes la primera; :) No te enfades, era una broma.
  2. He empezado los castings, y, aunque al principio me agobie un poco ya tenemos al prota, se llama Lluc, y es un chico muy amable. También estamos a punto de escoger a la chica, no me gusta como es de carácter, pero actúa muy bien.
Buf!! Tengo un montón de cosas mas que contaros, ojala no tardemos en vernos, y os paséis un día por París, que por cierto, ES PRECIOSO.

PD: Espero que me devolváis el mensaje lo antes posible, tengo muchas ganas de saber como os va, ( Tu también Elsa, que hace mucho que no me hablas de tu novio y tengo ganas de saber como te va con el).

Adiós wapas, besos Soledad. :D “

Justo cuando Soledad acabó de enviar el mensaje ha sus hermanas, cerró el ordenador y oyó el sonido de su móvil. Era un mensaje.

-Ojala que sea de Lluc...- Dijo Soledad para si misma.

Soledad, ya no me contestas a las llamadas, por favor tenemos que hablar, dejame disculparme. Es lo único que té pido.
Besos Nil.”

-Besos Nil- Dijo Soledad burleta, mientras continuaba hablándole al móvil- Pues que sepas que estoy en París cumpliendo mi sueño, y que no me hacen falta tus disculpas.

En eso momento Soledad empezó ha entristecerse, porque, aunque gracias al engaño de Nil hubiera conseguido su sueño, no dejaba de pensar en lo que lo quiso, y, que de algún modo, aún lo quería un poco.